¡Se acabó la fiesta amigos! Así lo certifican todos los poderes públicos de aquí hasta las más altas instancias del orbe planetario. Toca no digo ajustarse el cinturón sino vender la correa y ponerse una cuerda de liza en los pantalones o en la minifalda.
El mundo de la cultura, el mundo de la música como lo conocíamos hasta ahora está a punto de morir de éxito. Ya nada será lo mismo a como lo conocimos o lo vivimos esta última década. Toca repliegue, toca formato pequeño.
Venimos hablando hace tiempo en nuestros blogs de que los síntomas estaban ahí, bien visibles. Acordaos de cuando hablábamos de la desaparición de algún sello discográfico importante, de algunos festivales grandes y pequeños y de esos macroconciertos organizados con dinero público que pagaban cachés imposibles.
Los síntomas siguieron creciendo: discográficas que resisten, pero han reducido su apartado comercial y su personal al mínimo, festivales cercanos a los que ha ido menos personal del esperado, administraciones públicas que no pagan sus deudas a promotores cercanos y grandes eventos organizados en capitales cercanas que han sido una absoluta y total ruina.
El panorama no es que sea incierto, es negro. Las administraciones públicas (promotores culturales encubiertos) van a reducir drásticamente desde el próximo verano las partidas presupuestarias para apoyar a la cultura popular y para el año que viene van prácticamente a desaparecer. Eso conllevará que muchos festivales prácticamente desaparezcan si no son capaces de captar un público cada vez más exigente y reacio a pagar 30, 40 ó 50 euros por grupos prefabricados de éxito rápido y vacío.
Sólo veo un rayo de luz, una esperanza en estos momentos. Creo que volveremos al pequeño formato, al concierto íntimo, al concierto de autor, a la buena música y a los buenos músicos que sobrevivirán al grupo-imagen. Y estoy seguro que los buenos promotores musicales seguirán ahí ofreciéndonos lo que ellos sólo saben: que hay gente que está dispuesta a apoyar a los buenos músicos de verdad, a separar el grano de la paja.
Play List edición 183
GOLPES BAJOS: Malos tiempos para la lírica
NORAH JONES: Chasing Pirates (The Fall)
L.A.: Perfect Combination (Hevenly Hell)
Hoy pincha Leonor: DAILY PLANET: Vacaciones en Roma (Vacaciones en Roma)
SALLY SHAPIRO: Save Your Love (My Guilty Pleasure)
WEEZER: The Girl Hot (Raditude)
MICAH P. HINSON: Listen To Me Baby (All Dressed Up and Smelling of Strangers)
DRIVE-BY TRUCKERS: Like a Rolling Stone (The Fire Print)
CHUCK PROPHET: Hot Talk (Let Freedom Ring)
SPIRAL STAIRS: True Love (The Real Feel)
WOLFMOTHER: New Moon Rising (Cosmic Egg)
PIANO MAGIC: The Blue Hour (Ovations)
BLACKROK: Done Did It (Blackrok)
ED WOOD LOVERS: Monstruo (Lesiones Cerebrales)
MONTA MAN: Corazón Hooligan (El síndrome de la isla)
El Cuartelillo. Edición 183 (19 de myo de 2010)
Quería aclararle a Leonor que la canción dedicada es por admiración. Monstruo se le dice también a la persona que es grande en lo que hace. Por favor, queridísima infantita, no cojas al pier de la letra las comparaciones de esos \»monstruos\» tan negativos. Tómate al pie de la letra el estribillo: \»te quiero\».
Un fuerte abrazo
Querido amigo, estoy completamente de acuerdo con tu acertada reflexión sobre el momento que nos ha tocado malvivir y que, desafortunadamente nos espera en los próximos años. La desastrosa interpretación de la política que hacen estos gobiernos desnaturalizados ha conseguido llevarnos a todos hacia el acantilado como si fuéramos un rebaño complaciente de ovejas con la cabeza gacha siguiendo al borrego de turno. Algunos de nosotros ya han saltado, otros aún confían que, al final, el pastor decida salvar a unas cuantas de sus ovejas, pero creo que caerse al vacío existencial, por propia voluntad o empujados por las de atrás, va siendo cuestión de días.
Esta crisis no la padecen aquellos que han decidido meternos en ella y que, en realidad, son los únicos que tienen poder para sacarnos del atolladero pero no sin antes haber saneado sus malditos sistemas capitalistas basados en la explotación de personas y la malversación de fondos públicos. Los ricos siguen siendo igual de ricos, o incluso más; los pobres aumentan en número de forma escandalosa y la clase media, azotada por las turbias gestiones de la mal llamada izquierda, volverá a pagar otra vez los platos rotos. En realidad, si lo consiguen con los funcionarios, ¡quién nos asegura que la empresa privada no va a bajar también los sueldos de su personal?. ¿Quién lo va a impedir?. ¿Los sindicatos?, permíteme que me ría. Ese es el panorama, querido amigo, o así lo veo.
Respecto a la cultura, todos sabemos que en este país se contempla a duras penas como un capricho de la clase media, así que me temo que tenderá a replegarse hasta prácticamente desaparecer como bien dices. Tendremos suerte si sobrevive algo, por pequeño que sea, pero si es así creo que aún se podrá contar con el apoyo entusiasta de algunos de nosotros. Esa es la única ilusión que me queda, querido amigo. Como siempre, gracias por tus palabras. Hay en ellas una puerta abierta a la esperanza y como anda tan escasa no es cuestión de desaprovecharla. Felicidades también por esa inspirada play list.
Un abrazo
Àlex
Mi secretario personal, Andrea, italiano del sur, agradece como agua de mayo la canción de Norah Jones, pero está pidiendo a gritos una de Wham¡
Y yo he bailado como una loca con Sally Shapiro¡¡
Gracias por la dedicatoria, tú si que eres un monstruo querido amigo, y por supuesto, el amor es recíproco: \»te quiero\»