Cuenta que Sex Pistols fueron una banda que se dio a conocer con un disco y con una actitud revolucionaria que encabezó un movimiento, el punk, que se originó en Inglaterra. Resulta que esta banda se reunificó en dos ocasiones, y sobre todos los motivos ellos subrayaron que sólo se bajaban los pantalones por dinero, por lo que deduzco que no fue muy agradable que el público les volviera a escupir…
Y el hecho, el evento se hubiera traducido en partido de fútbol, y a ello hubiera ascendido cada una de las mesas en las que se sientan los invitados, por lo que ellos deciden que no formar parte del zoo dando su negativa en un comunicado a través de internet.
Ya sé que todos estos temas son ineludibles, son mil veces tratados, pero asumo que lo mejor es no quitarse los cascos nunca porque cuando empiezas a sentarte y pensar en el circo que engloba la industria discográfica existe algo que no entiendes. Puedes entender que alguien se hiciera con su primera guitarra para sacar sus castañas del fuego, como también creo en los motivos de alguien que va a una tienda de instrumentos a gastarse su primer sueldo. Es a veces la autenticidad de un arte mal considerado y la relación del arte con una profesión.
Ahí quedaran mitos, leyendas y sus respectivas administraciones que darían de comer a un país entero durante unos años, y digo éste por no decir otro, que diría Brian Jones si viera la película que le han dedicado… qué remedio consolarse con algún otro desengaño, como es el arte ya sea pintura, escultura, arquitectura, que alcanza las más altas pujas a través de los más buitres.
Pero como en el cuartelillo lo que importa de verdad es la música, con ella nos quedamos también en una nueva edición de la que esperemos te olvides si tu semana ha sido dura, larga, corta o recuerdes si ha sido brillante, productiva o simplemente una semana más…
Un abrazo cuartelilleros & cuartelilleras.
Jorge Cerdán
El Cuartelillo. Edición 11 (28 de abril de 2006)