A mi padre, con toda la fuerza del mundo
Lucha con ese corazón incandescente como aquel niño de plaza, fuente y adoquines. Lucha contra el mayor de tus silencios y sonríe a la vida con esa cara de valiente. Lucha con paciencia, con firmeza y agarrado de la mano. Lucha como siempre lo has hecho, de frente y sin miedo… Sin miedo al mañana y sin miedo a la nostalgia… Que la tormenta pasa y se repliega, que los días azules aun están por llegar. Que te espera una cuadrilla de sonrisas y una partida en el casino por acabar.
¡Muchos ánimos!
Gracias por seguir escribiendo pese a las circunstancias.
Un fuerte abrazo
Leonor, muchismos animos para ti, tu padre y toda la familia. Seran unos dias malos, pero se convertiran en un mal y lejano recuerdo dentro de poco.
Muchos besos