Recuperamos esta canción de Astrud, incluida en su primer disco, todo un corte de mangas al “establishment” . Ya desde sus comienzos, Astrud fueron únicos y sorprendentes, dos mentes inquietas a velocidades de vértigo con la vergüenza de vacaciones, siempre en el filo del abismo, o los amas o los odias, sin término medio.
Después de la batalla, los errores se hacen tan difusos que acaban desapareciendo. Y donde había hielo, ahora solo hay escarcha, una leve capa insignificante. Ahora he cambiado de idea, ahora me has hecho el daño necesario para tener suficiente lucidez. Ahora me he dado cuenta de que los cuentos ya están escritos y de que nunca tuviste el valor de ser testigo de nuestra historia. Ahora me río de los juglares y de las cenas con violín. Ahora me he dado cuenta de que las mentiras nunca son verdad.