Será la tan cacareada crisis del mundo de la música o que hay más oferta que demanda o que con tanta tecnología cada uno tenemos nuestra propia discográfica o emisora de radio o la saturación de DJ’s y disco móviles, el hecho es que está empezando a fraguar la idea del líder de Myst, ese grupo holandés que hace ya más de una año os pinchamos aquí, en El cuartelillo.
La idea es muy simple y se basa en el famoso proverbio que encabeza este blog: Si la montaña no va a Mahoma, Mahoma irá a la montaña. Traducido a nuestro mundo sería: si la gente no va a los conciertos, nosotros te llevamos el concierto al comedor de tu casa. Y parece que la idea está cuajando porque en España se ha abierto una franquicia de la idea holandesa.
Alguno me dirá que la idea no es nueva y que eso se hace desde que existe la música. Pues supongo que sí. Nuestro adorado Jesús Legua me contó que le montó a su pareja un concierto de Big City por su cumpleaños. Ejemplos podríamos enumerar hasta cansarnos. Tal vez, la novedad sea la organización profesional. Es decir, una empresa que pone todo salvo tú comedor y las bebidas.
La iniciativa está teniendo bastante éxito e, incluso, un artista tan conocido y querido por nosotros como Francisco Nixon, se ve que también lo hizo durante un tiempo. Este modelo también ha sido mejorado por un colectivo de artistas gallegos, con lo que no creo que podríamos calificarlo de idea snob.
Los artistas que lo hacen también están muy contentos porque es una manera de actuar debido a lo difícil que les resulta entrar en el circuito (en el caso de que lo halla en algunas ciudades) de salas y festivales.
Como nuestro programa tiene una audiencia modesta, aunque muy entendida, a lo mejor tenemos que copiar el modelo y llevaos el programa a vuestra casa. ¿Os imagináis a nuestros guionistas y a vuestro querido amigo haciendo la “función” de radio en la mesa de vuestro comedor mientras vosotros os morís de risa con vuestros amigos? Olvidadlo, lo habéis soñado.
ANOTHER SUNNY DAY: I don´t suppose I´ll get a second chance
Another Sunny Day, o lo que es lo mismo: Harvey Williams, fue uno de los abanderados del C-86 y por lo tanto de esa institución del pop que fue Sarah Records. Con una sencillez y unas letras totalmente cotidianas, sin lugar a dudas, Harvey Williams es uno de los mejores compositores que Inglaterra nos ha regalado.
Los lamentos se suceden después del vendaval y al despertar de la tragedia te empequeñeces a un ritmo frenéticamente imparable. Si es verdad, si no es verdad, si es pronto, si es tarde…Sólo sabes que duele, sólo sientes que duele. Y los fantasmas aparecen ya desnudos de sus sábanas… Y el cielo se convierte en un velatorio …
Y cuando llega la calma y el sosiego, vuelves a la batalla con el convencimiento de que no hay nada que perder… Y entonces ponemos el orgullo en otras manos…
Programa 58
El Cuartelillo. Edición 58 (22 de agosto de 2007)